La ley aumenta los derechos de exportación disminuyendo sensiblemente el precio y consecuentemente los márgenes esperados y magnifica nuestras pérdidas en caso que los rindes sean bajos.

¿Qué podemos hacer? En primer lugar, debemos replantear los márgenes esperados.

Seguramente nuestro margen cero, aquel rinde que nos devuelve nuestra inversión, subirá de tal manera que en muchos casos, como ocurre en lotes alejados de los puertos y/o de baja expectativa de rinde, no convendría sembrar.

los productores que tengan hacienda propia tienen la oportunidad de sembrar maíz o sorgo forrajero

Una consideración a tener en cuenta para lotes de calidad intermedia: los productores que tengan hacienda propia tienen la oportunidad de sembrar maíz o sorgo forrajero, o doble propósito en esos lotes para utilizarlos como alimentación de recría, pero siempre pensando en cuidarse de los gastos de siembra: semillas más económicas, sembradora propia aunque no sea la más precisa, dosis básica de fertilizantes que nos permita producir materia seca, barata, para ser consumida en verde durante el verano, o diferida en el invierno.

si los números son positivos seguir entonces con nuestro plan pero con un ojo puesto en el control de los gastos

Aquellos lotes de buena calidad, si los números son positivos (aunque sean menores a los esperados hace dos meses atrás), seguir entonces con nuestro plan sería lo más apropiado pero con un ojo puesto en el control de los gastos: monitorear los lotes con el objetivo de reducir las pulverizaciones a lo indispensable; devolver o canjear por otros insumos la semilla sobrante; en caso de lotes desparejos sembrar solo las partes buenas y no tentarnos a “cuadrar” las siembras.

Hacer nuestra producción más extensiva; replantear aquellas actividades intensivas como el feed lot, Utilizar más pasto y menos grano, aunque este ahora tenga un 15% menos de precio recordar que los resultados no mejoran en esa proporción.

invertir algo más de nuestro tiempo en hacer números en el escritorio

En resumen el consejo general sería “bajar un cambio”, invertir algo más de nuestro tiempo en hacer números en el escritorio consultando al agrónomo y al contador, además del control habitual del campo.

(*) Gerardo Gallo Candolo esIngeniero Agrónomo y Periodista Agropecuario; asesor y administrador de empresas agropecuarias y analista del sector en medios periodísticos: Radio Mitre, Radio Cooperativa y Canal 26.