El gobierno de Xi Jinping habría solicitado a las empresas estatales importadoras de productos agrícolas que suspendan las compras de soja y carne de cerdo a Estados Unidos, según informaron fuentes chinas con conocimiento sobre el asunto a la agencia de noticias Reuters. El motivo serían las recientes ofensivas del gobierno de Donald Trump responsabilizando a China por la crisis del coronavirus, y sobre todo la amenaza estadounidense de eliminar el tratamiento comercial especial para Hong-Kong.

La semana pasada China aprobó una ley de seguridad nacional para Hong Kong, territorio que dejó de ser colonia británica y fue recuperado por China en 1997 pero manteniendo autonomía respecto a Beijing. Producto de esa autonomía, muchos países aplican un tratamiento comercial especial con Hong Kong. Ante la aprobación de la ley de seguridad nacional, Trump anunció el fin del tratamiento especial a Hong Kong ya que dicha ley hiere la autonomía del territorio.

Beijing está dispuesto a defender “con firmeza” sus intereses en materia de soberanía nacional, seguridad y desarrollo.

Además, Trump anunció que suspenderá el ingreso de determinados ciudadanos chinos, identificados como un riesgo para la seguridad nacional y que investigará a empresas chinas cotizadas en Estados Unidos. También anunció que rompería totalmente con la Organización Mundial de la Salud, a la que acusa de ser complaciente con China respecto a sus responsabilidades por la pandemia.

Este lunes el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Zhao Lijian, manifestó que “cualquier acción o declaración que perjudique los intereses de China se encontrará con un firme contraataque”, y que Beijing está dispuesto a defender “con firmeza” sus intereses en materia de soberanía nacional, seguridad y desarrollo”.

En ese contexto, una de las fuentes consultadas por Reuters sostuvo que el gobierno chino podría abandonar la Fase uno del Acuerdo Comercial que comenzó a saldar la disputa entre ambos países, conocida como Guerra Comercial. En el acuerdo firmado en enero, el gobierno de China se comprometió a comprarle a Estados Unidos US$12.500 millones en productos agrícolas durante el primer año y US$19.500 millones en el segundo