Con el objetivo puesto en la expansión del sector agropecuario y la generación de miles de puestos de trabajo, el presidente de la Nación, Alberto Fernández, presentó ayer el proyecto de ley “Régimen de Fomento para el Desarrollo Agroindustrial Federal, Inclusivo, Sustentable y Exportador”. Esta iniciativa impulsada desde el Ejecutivo fue consensuada con el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), el cual reúne a más de 60 entidades empresarias del sector.

Luego de la pelea con el sector agropecuario causadas por el aumento de las retenciones y el cepo a la carne, y tras la derrota en la elecciones primarias del 12 de septiembre, el Gobierno nacional intenta dar un nuevo impulso a su gestión con noticias positivas y apostando al diálogo con todos los sectores económicos y sociales; y este es el turno del sector agropecuario.

El proyecto de ley que será enviado al Congreso Nacional en los próximos días contempla una serie de beneficios que apuntan a facilitar e impulsar el crecimiento de toda la cadena agroindustrial. Para acceder a este nuevo régimen, los productores y empresas deberán inscribirse en el “Registro Nacional de Fomento al Desarrollo Agroindustrial Federal, Inclusivo, Sustentable y Exportador”.

Entre los beneficios impositivos que se crearán esta la amortización acelerada en tres años, en lugar de diez años o más de acuerdo al tipo de inversión en cada sector del agro, excluidos los automóviles. Para las inversiones en construcciones e infraestructura, la amortización estará reducida al 50 % de la estimada. Además, se prevé la devolución de IVA para inversiones en un año, con el objetivo de beneficiar a plantas frigoríficas, acopios, usinas lácteas, plantas de balanceado, planta de tratamiento de frutas.

En el caso de la ganadería, el proyecto establece que “la valuación de la hacienda vacuna para faena a los efectos del Impuesto a las Ganancias se podrá realizar al momento de la venta y no al cierre del ejercicio, cuando la hacienda supere determinado peso (400 kilos vivo o 225 en gancho)”. De todas formas, se conoció que la autoridad de aplicación podrá incrementar los valores de referencia a 450 kg vivo y 250 kg para la res con hueso en gancho.

Finalmente, En cuanto a la promoción para la producción sustentable, los productores que adquieran semilla fiscalizada de producción nacional de especies como legumbres, forrajeras, hortícolas, cereales y oleaginosas obtendrán un bono o certificado de crédito por el 50% del valor, que podrán descontar adicionalmente de Ganancias. Esto mismo ocurrirá con los fertilizantes e insumos que contribuyan a la sustentabilidad del suelo y del ambiente.

Una vez aprobado, el régimen se extenderá hasta diciembre de 2025 aunque la norma habilita al Poder Ejecutivo a extender el plazo por cinco años más.

A través de un comunicado, el CAA expresó que este nuevo régimen es "aplicable a las nuevas inversiones de todo tipo de producción agropecuaria, agroindustrial y forestal de las 24 cadenas de valor del país presentes en todas las provincias". Lo que significa un impacto federal y en emprendimientos o empresas de todos los tamaños.

Durante la presentación, el presidente Fernández expresó: “Esta es una ley que reivindica la cultura del encuentro, el diálogo, una mesa común en donde sentarnos a construir las políticas de Estado que hacen falta para que Argentina sea el país en el que merecemos vivir”. Y además, resaltó: “Quiero que dejemos de lado a los cultores del no se puede, y que podamos construir, entre todos el país que nos merecemos, el país que le diga sí al productor agropecuario, al que produce en una industria, al desarrollo de la ciencia y tecnología, a los que trabajan. El país que le diga no a la división para seguir parados en el mismo lugar”.

Por su parte, el ministro de Agricultura, ganadería y Pesca de la Nación, Julián Domínguez, explicó que este proyecto de ley le dará "un impulso a la industrialización a través de incrementar el valor generado en origen incorporando tecnologías de última generación. También el fomento de nuevas inversiones en la cadena de valor. La cadena se comprometió a generar empleo decente con el compromiso de que el sector puede generar 700.000 puestos directos hacia el 2030".

Para cerrar, el ministro resaltó que la producción agropecuaria es una parte vital de la identidad nacional y afirmó que "el maíz, el trigo y la carne son considerados bienes culturales de los argentinos".

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