El Índice de Precios de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), valor de referencia del sector alimenticio por excelencia, promedió los 110,3 puntos en el índice de carnes. Esta cifra representa una suba ligera con respecto a junio y una suba del 19,6 por ciento en relación julio del año pasado.

Las cotizaciones de la carne de aves de corral, durante el mes de julio, crecieron considerablemente impulsadas por el aumento de las importaciones de Asia oriental por producciones limitadas en algunas regiones. La carne de ovinos, según la FAO, aumentó debido a la alta demanda a nivel internacional y la disminución estacional de producción de Oceanía.

Los precios de la carne bovina, por su parte, también aumentaron de acuerdo a los registros de la Organización. Esta suba, al igual que los precios de las otras carnes, responde a la disminución de suministros en las principales regiones productoras y la persistencia de la demanda, especialmente de China.

En contraste, los precios de la carne de cerdo según el Índice FAO de julio cayeron significativamente. Esta baja es explicada por la Organización como un efecto adverso de la caída de las importaciones de China; aunque sería circunstancial dada las limitaciones en los suministros debido a la propagación de la peste porcina africana en el mundo. 

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