Opinión

Los motivos de la fortaleza electoral de Lula en el Nordeste brasileño

En la primera vuelta, Lula obtuvo el 66% de los votos en el Nordeste. Si no fuese por su éxito en esa región, no tendría posibilidades de vencer a Jair Bolsonaro.

Por Ignacio Lautaro Pirotta | 22-10-2022 02:40hs

Si no fuese por la región del Nordeste de Brasil, Lula da Silva no tendría ninguna posibilidad de ganar las elecciones. Si se considerase solo el Nordeste, el resultado de la primera vuelta de la elección hubiese sido 66,76% para Lula, contra 26,97% para Bolsonaro. Es decir, un triunfo aplastante de Lula en primera vuelta. Pero a la inversa, si se quita al Nordeste del cálculo y solo se consideran las otras regiones, Bolsonaro hubiese ganado, también en primera vuelta. De las cinco regiones de Brasil, Lula ganó solo en el Norte y en el Nordeste, la primera por apenas 158 mil votos y la segunda por más de 13 millones. Esta región donde se encuentran estados como Bahía, Pernambuco y Ceará es el principal sustento electoral de Lula y el Partido de los Trabajadores (PT) desde hace ya varias elecciones.

¿Qué es lo que explica semejante fortaleza electoral de Lula y el PT en el Nordeste? Una respuesta muy común, dentro y fuera de Brasil, es que el programa de ayuda social llamado Bolsa Familia, implementado por Lula en su primer gobierno (2003-2007), habría sido el responsable de ese éxito en el populoso y pobre Nordeste.

Efectivamente, el Nordeste es la segunda región más poblada de Brasil, detrás del Sudeste (donde se encuentran los gigantes San Pablo, Río de Janeiro y Minas Gerais) y al mismo tiempo la que concentra más pobreza. Según un informe del Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE), del año 2020, el 47,9% de los pobres de todo Brasil se encontraban en el Nordeste, siendo que la región concentra el 27,3% de la población total del país.

Casi finalizando su primer año de mandato, en octubre de 2003, Lula creó el Bolsa Familia, unificando algunos programas sociales preexistentes y expandiendo su alcance significativamente. El Bolsa Familia (BF) se encuadró dentro del renombrado Fome Zero (hambre cero), programa que no prosperó pero fue mantenido como una suerte de marca del gobierno. Este programa de transferencia condicionada se vinculaba con el sistema de salud y el educativo, en articulación con estados y municipios y fue modelo de política pública para otros países. Alcanzó al final del gobierno de Lula a 12 millones de familias de bajos ingresos, con pagos de entre 40 y 200 reales por mes. Efectivamente, el BF fue central en la popularidad de Lula y el PT en el Nordeste. El programa significó una gran expansión de la ayuda social y muchas personas que no contaban con nada pasaron a recibir la ayuda del Estado.

Sin embargo, la lectura de que la actual fuerza del PT y Lula en el Nordeste descansa exclusivamente en el BF es bastante limitada. El BF explica mucho del fenómeno de Lula en el Nordeste, pero está lejos de explicarlo todo. ¿Por qué motivos los nordestinos continuarían votando a Lula a casi 20 años de creado el BF, cuando otros presidentes mantuvieron el beneficio e incluso Bolsonaro incrementó el monto y amplió el número de beneficiarios?

Las claves están sobre todo en el primer año de gobierno de Lula y en lo que el politólogo André Singer explicó en el artículo y posterior libro, “Raíces sociales e ideológicas del lulismo”. Ocurrió en ese período un fenómeno de “realineamiento electoral”, en donde sectores de clase media que anteriormente eran el principal sustento del PT, en estados con más actividad industrial del Sur y Sudeste, se apartan del partido, al tiempo que sectores más pobres, que él denomina “subproletariado”, se acercaron. Así, durante el primer gobierno de Lula cambió significativamente la composición del electorado del PT, dando lugar a lo que Singer y otros llaman de lulismo.

En ese doble movimiento que es el realineamiento electoral pesaron, por un lado, los escándalos de corrupción, alejando a los sectores medios. También posiblemente algunas promesas rotas, ya que en el primer año sobre todo, Lula llevó adelante un programa de ajuste y que incluyó reforma impositiva y previsional. Eso le valió, por ejemplo, la ruptura de un sector del bloque de diputados del PT, que terminaría formando el PSOL.

Del otro lado del realineamiento electoral, la aproximación de los más pobres se dio gracias a la política de redistribución general del gobierno, política en la que el BF fue central, pero no fue la única. El salario mínimo creció en términos reales un 50% durante los ocho años de Lula. Ese aumento fue todavía mayor en el Nordeste, porque en esa región hubo tasas de inflación menores a las del resto del país. El BF más el aumento real del salario mínimo combinados tuvieron un efecto dinamizador de las economías locales menos desarrolladas, en muchas ocasiones municipios pequeños del interior en donde el programa tuvo un fuerte impacto. Todo eso en el marco de un modelo económico centrado en el fortalecimiento del mercado interno. En ese modelo también fueron importantes los créditos de fácil acceso destinados a los sectores populares. Singer también señala que durante el período comenzó a haber mayor presencia del gobierno nacional en el Nordeste por medio de diferentes programas, obras de infraestructura y políticas para los numerosos pequeños productores agropecuarios.

Fueron el conjunto de esas políticas, y no el BF en soledad, las que sacaron de la pobreza a “30 millones de personas”, como se suele repetir siempre que se habla del legado de Lula. Fueron ese conjunto de políticas las que permitieron erradicar el hambre con los gobiernos del PT y las que hicieron que el desempleo se situase por debajo de los cinco puntos.

Con Lula el Nordeste fue priorizado como nunca antes en la historia. Se trató además de un presidente nacido en el Nordeste y que explotó su origen y su historia de vida de migrante hacia el sur del país en busca de oportunidades, al igual que miles de nordestinos.

A todo eso mencionado por Singer, y que se refiere al período entre 2003 y 2006, como forma de explicar el realineamiento electoral, se le pueden agregar otros aspectos, que fueron continuados por Dilma Rousseff, la sucesora de Lula. Por ejemplo, la creación de nuevas universidades y escuelas técnicas, una política nacional pero con énfasis en el Nordeste. El crecimiento de la matrícula universitaria y las cuotas raciales y sociales, que le permitieron a muchas familias que alguno de sus miembros accediese a la universidad por primera vez. Además, la creación de cisternas para proveer agua en el interior, siendo una región caracterizada por la falta de agua, y, en el mismo sentido, las obras de transposición del Río San Francisco.

Por último, con Lula el Nordeste fue priorizado como nunca antes en la historia. Se trató además de un presidente nacido en el Nordeste y que explotó su origen y su historia de vida de migrante hacia el sur del país en busca de oportunidades, al igual que miles de nordestinos. En ese combo de un presidente con políticas para la región y que la prioriza tanto en sus políticas como en su discurso, pesan también las identidades regionales y las rivalidades, en donde el Nordeste es a menudo discriminado por los estados centrales del sur del país. Se trató de un presidente que se acercó al Nordeste como ningún otro y que gobernó para el Nordeste como ningún otro.

Por lo tanto, hay un aspecto general que explica el éxito del PT en el Nordeste que tiene que ver con lo social. El PT tiene un caudal de votos inmenso entre los más pobres, y estos se encuentran mayormente en el Nordeste. Pero en el Norte de Brasil, por ejemplo, con una población significativamente menor, el porcentaje de pobreza es más alto, y allí el PT no tiene el mismo éxito.

Sin dudas el componente regional también existe, y que tiene que ver con lo mencionado antes. Por último, el pago de ayuda social, como e BF, sin dudas tiene efectos electorales, pero por sí solos no tan fuertes. En cambio, si se considera el conjunto de políticas y cambios sociales y económicos, eso puede explicar, por ejemplo, la vigencia del lulismo a más de una década de su gobierno. Se trató, en definitiva, no de una sola política, sino de todo un modelo de país.

Fuentes consultadas:

Para el voto por región: "Infográfico elecciones", Valor Económico,  https://infograficos.valor.globo.com/especial/votacao-nas-regioes-e-nos-estados.html

Datos sobre pobreza: "Investigación de presupuestos familiares", Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE), 2020.  https://biblioteca.ibge.gov.br/visualizacao/livros/liv101761.pdf

Para consultar todos los resultados de la primera vuelta, mapa de resultados de Página 12: https://www.pagina12.com.ar/486672-elecciones-en-brasil-el-mapa-de-resultados

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