La relación Campo-Fernández contiene asperezas históricas que emergieron desde el conflicto del 2008, que terminó con un país con cortes de rutas, paralizado cuasi totalmente durante cuatro meses, desabastecido. Macri, en contraste a las políticas implementadas por el Kirchnerismo en su momento, eliminó las retenciones durante casi 3 años de su gestión, hasta que el FMI presionó para su reimplementación. Impuso retenciones de un 12% con un tope de 4 pesos por dolar para productos primarios y 3 para los de valor agregado, que con la continua devaluación terminó por ser una cifra irrisoria.

"Les pedimos a los que más tienen, un mayor aporte solidario para quienes la están pasando mal"

Por ende, toda medida presentada por Fernandez que se acerque a las retenciones duras y una complejización impositiva, resulta de mal gusto para el sector ya que implicaría la reducción de su rentabilidad. Revivir esas políticas de retenciones aunque sean incomodas para el sector, resultan apremiantes para conseguir el equilibrio de las cuentas públicas. De parte del Frente de Todos, reconocieron que el aumento exagerado de retenciones pondría en riesgo la producción y constituyen un paliativo débil para beneficiar al consumidor, y cuando se han aplicado de manera exacerbada, se redujo la producción y se elevaron los precios.

En campaña, Fernández tuvo contados encuentros con el sector agro-ganadero, que no aclararon del todo la incidencia del campo dentro del proyecto de país de su gobierno.Intenciones de los referentes del agro en comenzar a negociar con Fernández, no faltaron: La Mesa de Enlace postuló 14 puntos clave para incluir dentro de las prioridades del país, la Federación Agraria Argentina solicitó medidas especiales para el sector, entre otras. Como respuesta, el actual presidente, se comprometió a dialogar y consensuar las medidas que vayan a implementar con todos los actores de la cadena, prueba de ello fue la reunión que tuvo el 16 de noviembre Fernández con referentes del sector agroindustrial para analizar el plan para combatir el hambre.

Desde entonces, Fernández solicitó al sector colaboración con el futuro del país, a través de retenciones a las exportaciones de cereales, soja y carne vacuna. En el discurso de asunción, Alberto Fernández hizo una alusión tácita a las retenciones: "Les pedimos a los que más tienen, un mayor aporte solidario para quienes la están pasando mal", sugiriendo una suba impositiva que recaerá en el sector productivo. Esa frase, sumada a dichos previos al inicio de su gestión que presentaban la aspiración de Fernández de que en su gobierno "el campo haga su aporte para poner a la Argentina de pie, para que comience a caminar, paso tras paso, rumbo al desarrollo de la justicia social", permiten interpretar que el campo será trascendental para sacar al frente al país ante el difícil momento que atraviesa, pudiendo en muchos casos mermar los ingresos de los productores.

"Si se quiere impulsar el sector, sería contraproducente aumentar las retenciones"

Como gesto para iniciar con el pie correcto, Alberto Fernández invitó por la tarde del 10 de diciembre a los integrantes de la Mesa de Enlace a participar de la asunción del nuevo gabinete, entre los que se encuentra una figura que será determinante durante la nueva gestión: Luis Basterra, el Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca. Ha trascendido que varios referentes del campo han solicitado audiencias con el mismo ni bien asuma su gestión como Ministro, con cierta imperiosidad por su falta de pronunciación sobre la propuesta de los 14 puntos.

Las respuestas del sector frente a lo dicho durante el discurso de asunción y en campaña, son variadas. Por una parte, el presidente de Coninagro, Carlos Iannizzotto, demostró buena voluntad sosteniendo que "el sector cooperativo está dispuesto a llevar adelante acciones en función de los que menos tienen (...) que deberán ser acompañadas por condiciones de trabajo e inversión para desarrollar políticas destinadas a los más necesitados".

"El campo haga su aporte para poner a la Argentina de pie, para que comience a caminar, paso tras paso, rumbo al desarrollo de la justicia social"

Daniel Pelegrina, presidente de la Sociedad Rural Argentina salió al cruce con el mandatario, destacando que el campo ya viene haciendo su contribución a través de los derechos de exportación, "si se quiere impulsar el sector, sería contraproducente aumentar las retenciones" y destacó que la "verdadera contribución es generar un tercio del trabajo y mas de 60% de las divisas" y propuso "eliminar o reducir los tributos distorsivos (...) necesitamos buscar un sistema impositivo más amigable". Reflotando los 14 puntos de la Mesa de Enlace, Pelegrina resaltó la importancia de abrir los mercados y activar exportaciones, a la vez que afirmó que la SRA estará disponible para trabajar en conjunto. También valoró las intenciones dialoguistas y de conciliación del presidente Fernández.

Desde el El Frente de Todos anunciaron su intención de aumentar la inversión extranjera en el campo y el crédito de los productores, pero para ello será imprescindible las mejoras dentro del modelo productivo actual: desde el uso de semillas, la deforestación y el uso de agroquímicos. No sólo para abrir mercados sino para impedir el cierre de los ya conquistados. El foco está puesto en hacer mejoras dentro del sector para optimizar la competitividad.

La Federación Agraria Argentina, por su parte, emitió un comunicado en linea con la SRA, agradeciendo los mensajes de unidad y la intención de convocar a toda la cadena para dar con puntos de consenso que mejoren las condiciones de la economía. Sin embargo, resaltó la importancia de quehaya "diferenciaciones entre quienes no podemos hacer más esfuerzos, porque tenemos necesidades urgentes", luego la entidad recordó su pedido histórico: "desde hace mucho estamos pidiendo que se implemente un sistema de créditos no bancarios, que nos permita seguir produciendo (...) sería un aliento para los productores de menor escala y de la agricultura familiar y no más beneficios para los que especulan".

"Eliminar o reducir los tributos distorsivos (...) necesitamos buscar un sistema impositivo más amigable"

Teniendo en consideración que Argentina se encuentra en un momento complejo y el campo representa una de las fuentes principales de ingreso de divisas, sin duda éste cumplirá un rol importante. Desde la actual gestión, admitieron que el campo es un sector económico clave para aumentar la cantidad y mejorar la calidad de las exportaciones, por lo que será un eje para el futuro gobierno.

Es casi un hecho que habrán subas de retenciones a las exportaciones. Sin embargo, por el momento hay tantas versiones como intereses en juego, habrá que estar atentos a los próximos pasos de Basterra y Fernández