La reapertura de ese mercado es uno de los temas que el gobierno de Jair Bolsonaro ha puesto en la mesa de negociaciones en su alineamiento con Estados Unidos. En contrapartida los brasileños habían aceptado autorizar la importación de 750 mil toneladas de trigo libre de aranceles, medida que se concretó a inicios de noviembre. Según medios locales, la noticia cayó mal entre los brasileños y se sumó a otros sinsabores como el retiro del apoyo de Estados Unidos para el ingreso de Brasil a la OCDE.

la reapertura del mercado depende de un nuevo estudio de calidad

La entrada de carne bovina de procedencia brasileña fue prohibida por Estados Unidos en 2017 luego de que fueran detectadas alteraciones en el producto y una red de corrupción para realizar certificados de calidad falsos. Desde entonces, tanto la administración de Michel Temer como la actual se han esforzado en reabrir ese mercado. Sin embargo, la administración Bolsonaro guardaba fuertes expectativas positivas en función de su aproximación con el gobierno de Donald Trump.

En 2017 las exportaciones de carne brasileña a Estados Unidos alcanzaron los US$ 292 millones. Según informó la ministra de Agricultura de Brasil, Tereza Cristina, toda la información adicional solicitada por Estados Unidos ha sido inmediatamente remitida. Sin embargo, la reapertura del mercado depende de un nuevo estudio de calidad, el cual puede demorar hasta un año según las autoridades brasileñas