En esta nueva modalidad de turismo post pandemia, la riqueza natural del territorio argentino ofrece la posibilidad de disfrutar de 23 humedales, distribuidos de norte a sur en 16 provincias, que cuentan con amplios espacios y pureza ambiental, protegidos por la Convención Ramsar internacional.

¿Qué son los humedales?

Según la Convención Ramsar, se denomina humedales a  “las extensiones de marismas, pantanos y turberas, o superficies cubiertas de aguas, sean éstas de régimen natural o artificial, permanentes o temporales, estancadas o corrientes, dulces, salobres o saladas, incluidas las extensiones de agua marina cuya profundidad en marea baja no exceda de seis metros”.

¿Qué es la Convención Ramsar?

Es un tratado internacional firmado en 1971, en la ciudad iraní que le da el nombre, cuyo objetivo es la conservación y el uso racional de los humedales de importancia ambiental y que son hábitat de especies migratorias o en riesgo.

¿Dónde se encuentran los humedales en Argentina?

Distribuidos a lo largo del país, llaman la atención de los turistas ya que se encuentran en lugares muy atractivos paisajísticamente, como reservas naturales nacionales o provinciales, en las altura de las punas, en desiertos, llanuras, bosques, islas, incluso en la Ciudad de Buenos Aires.

En ellos se pueden realizar diversas actividades como observación de fauna y flora, caza fotográfica, deportes náuticos o de aventura.

Al norte del territorio argentino, en la puna jujeña y vecino a Bolivia, se encuentra la Laguna de los Pozuelos, cuyo espejo de agua salitrosa ubicada a 3.600 metros sobre el nivel del mar (msnm) alberga aves acuáticas del noroeste, llegando a encontrar hasta 26.000 flamencos de tres especies andinas.

En cambio, en el extremo sur del país cerca de Ushuaia, el Glaciar Vinciguerra y Turberas asociadas, combina nieves permanentes con humedales a diversas alturas. Debido a la dificultad de su acceso, desde 2015, se llevaron adelante obras para mejorar la calidad de la visita.

Por su parte, la puna de La Rioja, deslumbra con la fascinante Laguna Brava, muy visitada por contar con aguas blanquecinas de alta salinidad, a 4.200 msnm, donde se encuentran flamencos rosados y habita una colonia de vicuñas y zorros andinos.

En la Ciudad de Buenos Aires existe uno de los pulmones verdes más grandes de Latinoamérica, la Reserva Ecológica Costanera Sur, que presenta bañados, bosques y pastizales, rico en avifauna y anfibios.

A pocos kilómetros de la ciudad, existen sitios Ramsar bonaerenses como la Bahía Samborombón y de Otamendi (Campana), Campos del Tuyú y Ciervo de los Pantanos, ideales para una breve escapada.

En tanto, la provincia de Santa Fe posee 3 humedales: al sur, el Humedal Laguna de Melincué, una estación de aves migratorias y residentes que se complementa con el turismo termal, deportes náuticos y pesca, entre otros. Continuando sobre el río Paraná, se hallan el Delta del Paraná junto con su parque nacional y Jaaukanigás, al noreste, una zona casi virgen de turismo rural y de aventura.

Por último, uno de los mayores atractivos turísticos del país es la reserva natural y Patrimonio de la Humanidad, Península Valdés, ubicada en la provincia de Chubut. Allí el avistamiento de ballenas es una actividad imperdible. Este sitio Ramsar se encuentra dividido en dos subsitios, sobre los golfos Nuevo y San José, comprendiendo tierras de estancias y playas públicas.

Además de los sitios Ramsar mencionados, las provincias de Formosa, Corrientes, Chaco, Entre Ríos, Catamarca, San Juan, Mendoza, San Luis, Neuquén y Córdoba también cuentan con estos lugares de atractivo paisajístico y encanto natural.

Fuente: Télam, Ramsar, Wikipedia / Foto de portada: El Resaltador

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