Investigadores y profesionales del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), de Bordenave, en la provincia de Buenos Aires, desarrollaron un nuevo cultivar de cebada: Militza INTA.

Esta nueva variedad representa una ventaja competitiva para los productores argentinos y la industria cervecera. Por esto, "desde el INTA avanzamos en la investigación e inscripción de nuevas variedades con genética local", señaló Fernando Giménez , Coordinador del Programa de Cereales y Oleaginosas.

En la actualidad, el cultivar de cebada Militza INTA constituye una excelente opción para el mercado de exportación de grano, el cual posee muy buen precio, impulsado por la demanda de China y los acuerdos comerciales. "El uso de este nuevo cultivar, junto con una estrategia de fertilización nitrogenada orientada a aumentar solo el rendimiento, maximizará el beneficio económico", destacó el Coordinador del Programa.

Según el especialista del Instituto, la cebada favorece la diversificación de las rotaciones agrícolas, genera un balance positivo de carbono y tiene como principal ventaja liberar el lote unos días antes que el trigo, lo que se traduce en un aumento de rendimiento en el cultivo de segunda, ya sea soja o maíz.

En cuanto a los parámetros comerciales, "se caracteriza por ser de mayor y más estable calibre de granos, en todas las condiciones ambientales evaluadas", expresó Verónica Conti, responsable del Laboratorio de Calidad de Cebada del INTA Bordenave.

En lo que respecta a su perfil sanitario, Agustín González, especialista del INTA Bordenave, dice que "es muy bueno" y recomendó su siembra los primeros 20 días del mes de junio en la región pampeana norte, con una densidad de entre 250 y 280 plantas por metro cuadrado. Para el caso de la región pampeana sur, lo ideal según González, es del 20 de junio al 15 de julio con una densidad de siembra de entre 220 y 250 plantas por metro cuadrado.

Resultado de la combinación de factores ambientales, aplicación de insumos y desarrollo de nuevas tecnologías, el cultivo de cebada en la Argentina se ubica en el tercer lugar de importancia en la producción de cereales por debajo del maíz y el trigo, y se destaca por su calidad.

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