Este instrumento consiste en una carcasa de teclado y bajo que están conectadas por un fuelle plegable. Dentro del mismo hay lengüetas de metal, que crean el sonido por medio del aire que es generado por el fuelle y fluye alrededor de ellas haciendo que vibren, de esta manera se genera el sonido en los acordeones.

Según el tamaño del instrumento, el acordeón puede tener entre veintidós y cuarenta y cinco teclas similares a las del piano. El tablero del bajo contiene un número variable de botones, según el tamaño del instrumento: 8, 12, 24, 32, 36,48, 60, 72, 80, 96 o 120. Los botones están ordenados en filas verticales paralelas, de manera que cada fila proporciona un tipo determinado de bajo.

Su nombre “acordeón” fue patentado en el año 1829.

Los registros del acordeón se encuentran sobre el lado derecho, pero según el tamaño del instrumento puede tener registros sobre el lado izquierdo.

El acordeón está construido a partir de cientos de piezas, y gran parte de él está ensamblado a mano. El primero fue construido a principios del siglo XIX, a lo largo de los años ha evolucionado de tal manera que su ejecución es cada vez más versátil. Su nombre “acordeón” fue patentado en el año 1829.

En sus comienzos este instrumento se basó en el principio de la armónica o conocido por algunos como un órgano bucal. Cuando se reproduce, suena un tono después de soplar y otro tono después de extraer aire. Esto se conoce como el sistema diatónico. Los acordeones diatónicos generalmente vienen en ciertas combinaciones de teclas y se usan principalmente para la música folclórica