Este jueves 9 de diciembre, el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Julián Domínguez, se reunirá con referentes del sector cárnico, para negociar las acciones que se implementaran con el objetivo de contener los precios del mercado interno.

La inyección de dinero en los consumidores a causa de subsidios, bonos y aumentos paritarios, entre otros, lamentablemente, trae como consecuencia que un sector del comercio interno apueste a la especulación y suba los precios, en este caso de una alimento básico y esencial de la familia argentina como es la carne vacuna.

En este contexto, el Gobierno evalúa, por un lado, a través de la secretaria de Comercio Interior a cargo de Roberto Feletti, congelar los precios, y por el otro, sostener y extender hacia 2022 las restricciones a las exportaciones, a fin de controlar los aumentos en el mercado interno. No obstante, desde el sector empresario, representado protagónicamente por la Mesa de Enlace, plantean (más bien exigen) que se levanten las restricciones en su totalidad para la comercialización externa de productos cárnicos.

La puja tiene un punto de encuentro: es necesario apuntalar el crecimiento de la producción de la carne vacuna en el país que lleva décadas planchado. En este sentido, desde el Gobierno consideran tomar medidas para propiciar la accesibilidad a créditos y otras herramientas financieras.

Gabriela Cerruti, portavoz de la Presidencia, el jueves pasado anunció la mencionada reunión programada para este jueves y, en dicho marco, especificó que, además,  la cartera agropecuaria presentará "el Plan 2022 / 2023 que contempla la producción de carne, maíz y de trigo".

Cabe esperar qué resultará del inminente encuentro entre el Gobierno y los empresarios del sector de la carne, para augurar o no un fin de año sin sobresaltos en cuanto a los precios de la carne al consumidor y un programa de certezas para el sector productivo.

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