Finalmente, se llevó a cabo el desalojo del establecimiento "Casa Nueva",luego de que la jueza titular del Tribunal de Juicio y Apelaciones de Paraná, Carolina Castagno, desestimara el planteo de Dolores Etchevehere contra sus hermanos y su madre.

Alrededor de las 19:00, salieron los autos y camionetas del predio que llevaban a la gente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) de Juan Grabois para abandonar el predio.  La menor de la familia Etchevehere, se negó a irse y fue detenida por desobediencia judicial. Aunque horas después, fue liberada. Así lo informaban desde la cuenta de Twitter de Proyecto Artigas:  "Dolores Etchevehere se encuentra en libertad, dispuesta a seguir enfrentando en la Justicia a la mafia de sus hermanos. Proyecto Artigas ha plantado su primera semilla. ¡La lucha sigue!"

Dolores Etchevehere se encuentra en libertad, dispuesta a seguir enfrentando en la Justicia a la mafia de sus hermanos. Proyecto Artigas ha plantado su primera semilla. ¡La lucha sigue!

La jueza Castagno había ordenado el desalojo e inmediata restitución a los ocupantes originales de la estancia, ocupada por militantes de Juan Grabois, dando lugar a los recursos de apelación presentados por los fiscales y la querella. La magistrada calificó la ocupación como un accionar “inconsulto y clandestino” y avaló el reclamo de los hermanos Luis Miguel, Juan Diego y Arturo Sebastián Etchevehere, y su madre, Leonor Barbero Marcial. Ante esto, Dolores había declarado, "de acá me sacan muerta".

Leonor Barbero Marcial de Etchevehere y sus tres hijos varones fueron los primeros en ingresar a la estancia, en medio de aplausos. Una vez dentro de la casa, la familia firmó el acta de restitución del predio.

Los Etchevehere se mostraron sorprendidos e “impactados” por el estado en el que los militantes de Grabois dejaron el lugar, que según sus palabras encontraron “muy revuelta”. “Está todo sucio y no hay nada en su lugar”, aseguraron.

Por el campo, habían pasado unas 100 personas a lo largo de la “ocupación” que duró 14 días. En el jardín, al lado del casco de la estancia de 1200 hectáreas con explotación agrícola, ganadera y lechera, se encontraron con una huerta de 10 x 5 metros con algunos plantines de perejil sembrados por quienes tomaron el predio.

En la causa, los hermanos Etchevehere y su madre, habían mostrado documentación que avalaba la cesión de acciones de Dolores Etchevehere a favor de otra sociedad anónima, por lo que desconocían que aún conserve derecho sucesorio alguno sobre la estancia y que pueda disponer de los bienes que dejó en sucesión su padre, Luis Félix Etchevehere. Es por esto que consideraron que este no era un tema familiar, sino lisa y llanamente una usurpación. Situación que fue luego avalada por la jueza que finalmente ordenó su desalojo y restitución.

Foto de portada: Franco Fafasuli/Infobae.

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