OPINIÓN

Líderes y plataformas, los dueños del poder

Por Luis Chervo | 31-01-2021 11:58hs

Cuando uno repasa los acontecimientos en las redes de las últimas semanas, necesariamente debemos encarar el análisis de lo que aconteció con el veto de Donald Trump en sus redes sociales, ¿mal o bien? Es el gran debate.

La canciller en retirada de Alemania Angela Merkel consideró que la decisión de las plataformas sociales de bajar a Trump con sus 88 millones de seguidores, es al menos PROBLEMÁTICA, ya que muestra la omnipresencia de las plataformas en términos de libertad de expresión. Al mismo tiempo otros líderes europeos han reaccionado en virtud de que una empresa privada limite la libertad de expresión de un gobernante, sea del país que sea, pero al mismo tiempo se ve, de parte de otros líderes, que hubo una defensa de la democracia de parte de las plataformas, como decía mi abuelo Teodoro los domingos antes de ir a las cuadreras de Albarellos: “final abierto”.

La canciller Merkel, tiene un vocero de lujo, Steffen Saibert, quien en declaraciones del 11 de enero dijo: "Es posible interferir en las libertad de expresión, pero según límites definidos por las leyes y no por la decisión de una dirección de empresa".

Estamos en tiempos de dudas de en dónde están los límites, de todo tipo, entre ellos, la frontera del buen gusto con lo chabacano, burdo y soez, dónde está la ética de una empresa privada, por lo cual debe haber leyes que limiten correctamente dónde comienza el delito por odio y resentimiento y donde la desinformación pasa a ser interesada para volcar la voluntad ciudadana.

Otro que se expidió fue el presidente del Grupo Socialdemócrata del Parlamento Europeo, Iratxe García, quien dijo: "se trata de encontrar el equilibrio entre la libertad de expresión —que es un derecho fundamental— y la protección de la democracia".

El tema de la actitud de las plataformas todo poderosas para muchos llegó tarde, pues no lo hicieron antes de las enormes y cuantiosas mentiras que fue diciendo Trump a través de los años de gobierno, y ¿por qué se animan ahora? cuando, como dicen en el Barrio del Abrojal, “tapado con diarios está”.

Se trata de encontrar el equilibrio entre la libertad de expresión —que es un derecho fundamental— y la protección de la democracia.

El líder del nuevo intento de Imperio Ruso, Vladimir, dice que la prohibición de Donald, es similar a una enorme explosión nuclear en el ciberespacio, comparando con un golpe a los valores democráticos preconizados por la sociedad occidental.

Por otro lado, esta vez un líder latino americano, López Obrador, desde México, ha dicho que la decisión de Twitter y Facebook, es censura pura. Y agregó: "No puede ser que una empresa particular se erija en la institución mundial por sus alcances de la censura, como la Santa Inquisición de nuestros tiempos en lo que corresponde a las redes sociales, eso no se puede aceptar"; y fue más allá, pues dio directivas a su canciller, don Marcelo Ebrard, que haga contactos con Merkel, más G20 y otros líderes mundiales, para elaborar una propuesta conjunta contra las restricciones a usuarios en las redes sociales.

En principio, Europa se presenta como el sector del mundo más dinámico y más preocupado por estos nuevos temas. Buscando ordenar el caos que significa hoy la internet, y este nuevo fenómeno que son los guardianes de las redes, atentos a lo que se escribe allí y también, según muchos, lo que se habla incluso, cerca de los aparatos telefónicos.

La necesidad de regular está, hay borradores en Europa para marcar nuevas reglas mirando con atención a Google, Amazon y Facebook, pues detrás de esto van modos nuevos de comercialización y de relacionarse las personas, por lo cual vienen multas y prohibiciones que deberán ser pensadas y definidas por el Parlamento Europeo que está muy preocupado al respecto.

Los pasos siguientes se darán en febrero, cuando la Unión Europea evaluará la regulación del Reglamento General de Protección de Datos, con el fin de adaptarse a las nuevas exigencias de proteger a la población de esta nueva dominación, la de las plataformas.

Francia ha encontrado en el liderazgo de Macron, al líder del proponente de impuestos digitales, pero que se encuentra con objetores, como lo son Irlanda, Dinamarca, Suecia y Finlandia, aunque la base de propuesta del premier de Francia es que las empresas tecnológicas son cuestión pura de Justicia Social.

Por otro lado, Francia tendrá sus seguidores en pedir impuestos a los grandes del negocio tecnológicos, que en su mayoría son de EEUU, entre los países que pretenden imponer impuestos están Reino Unido, España, Italia y Austria.

Estos nuevos tiempos vienen con un gran cambio en EEUU, en donde un hombre de casi 80 años, católico, experimentado, junto con una joven mitad jamaiquina y mitad indú, de vice, tendrán el tremendo desafío de pacificar el país del norte, extendiendo la mano, pero dando respuestas que vienen esperando desde décadas, aceptación del norte y sur, de convivir abiertamente en todo el territorio, los blancos, más los latinos, más los negros, más las nuevas minorías afro asiáticas. Los 81 millones de votos avalan y los 75 millones de Trump controlaran la gestión que empezó a los golpes de codo pero que deberá entender a este mundo multipolar que busca una integración definitiva en donde todos encontremos nuestro lugar bajo el sol del progreso, el desarrollo y el humanismo, cuidando nuestro planeta.

 

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