Laboratorios confirmaron, de forma pública, el acuerdo con la Secretaría de Comercio. De esta forma, los precios se retrotraen al 1 de noviembre y quedan frenados hasta el 7 de enero. La iniciativa apunta primordialmente al sector que viene aplicando aumentos por encima de la inflación.

A pesar de las idas y vueltas, y las diferencias encontradas que hubo en una primera instancia, las tres cámaras de laboratorios, nacionales y multinacionales, CAEME, CILFA y Cooperala dieron a conocer, a través de un comunicado, la aprobación del congelamiento de precios propuesto por Nación. En el documento no dejaron de destacar que la decisión tomada se dio en un marco de colaboración, y buen diálogo entre las partes, y aclararon que, "cada laboratorio asociado ejercerá la facultad de adherir individualmente a esta iniciativa".

Cuando la iniciativa empezó a tomar cada vez más presencia no causó agrado en las cámaras que nuclean a los principales laboratorios y a través de un parte de prensa sostuvieron que resultaba “innecesario alterar las reglas de la libre competencia, a través de mecanismos de congelamiento de precios”. Asimismo, afirmaron que la industria farmacéutica venía haciendo grandes esfuerzos para sostener la accesibilidad de los medicamentos y ratificaron su compromiso de mantener los valores promedios “en línea con la dinámica evolutiva de precios del IPC - índice de precios al consumidor- del Indec - Instituto Nacional de Estadística y Censos -”.

El diálogo entre las partes llegó a buen puerto y finalmente llegaron al acuerdo. Con esta modalidad, Nación actúa de forma directa en sectores en donde, la presencia de formadores de precios, provoca diferencias en el mercado y perjudica al bolsillo de la población.

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