El titular de la cartera de Agricultura y Ganadería cordobés, Sergio Busso, es oriundo de la localidad de Serrano, en el sudeste provincial, departamento de Roque Sáenz Peña, donde fue intendente entre 1983 y 1987. En su momento, fue el intendente más joven del país, electo a los 24 años. El ministro es abogado, recibido en el año 1980 en la facultad de Derecho de la Universidad Nacional de La Plata.

Busso es el ministro de Agricultura y Ganadería de Córdoba desde 2015 y, a lo largo de sus 30 años de trayectoria, ha ocupado diferentes cargos a nivel provincial. Durante su gestión al frente de la cartera productiva se ejecutaron programas insignia del gobierno provincial, como el Programa de Buenas Prácticas Agropecuarias, convertido en ley en 2019; el Programa de Mejoramiento de Caminos Rurales; las Cuencas de Conservación de Suelos, Agua y Caminos y el Plan Agroforestal.

¿Cómo es la agricultura en la provincia? ¿Cuántos de estos cultivos son para el mercado interno y cuántos se exportan?

Córdoba ha pasado a ser la principal provincia productora del país y eso es algo que se lo debemos al esfuerzo y compromiso de nuestros productores, que siempre están a la vanguardia. Desde el Estado lo que tratamos de hacer es acompañar ese empuje y facilitarles la cosas, potenciar aquello que necesita de una tracción, siempre teniendo como bandera la sostenibilidad del sistema productivo. La provincia destina a esta actividad unas 8,5 millones de hectáreas de su superficie, lo que constituye aproximadamente el 50 por ciento del total de la superficie geográfica.

Los principales cultivos son, en orden del área destinada a los mismos los siguiente: la soja (4,5 millones de hectáreas); el maíz (2,5 millones); el trigo (1,5 millones, con la aclaración de que ocupa parte de la misma superficie que soja y maíz); el maní (300 mil hectáreas); el sorgo (150 mil); el girasol y el garbanzo (30 mil hectáreas aproximadamente cada cultivo). Además, hay producción de hortalizas en áreas con disponibilidad de riego, se destaca la producción de papa, con alrededor de 30 mil hectáreas.

Con relación al destino de la producción, la situación es la siguiente: soja, maní y garbanzo se destinan principalmente (más del 90 %) al mercado externo (procesado o sin procesar). El trigo y el maíz se destinan tanto al mercado interno como a la exportación en proporciones similares y el girasol y sorgo tienen como destino principal al mercado interno. La papa se destina casi exclusivamente al mercado interno.

¿Qué beneficios les proveen las represas y embalses a la actividad agroganadera?

Desde el punto de vista de la producción agrícola, las represas y embalses forman parte de los sistemas de producción que utilizan riego en forma permanente o complementaria. Su disponibilidad contribuye a la instalación de equipos de riego por goteo, aspersión o microaspersión que son mucho más eficientes en el uso del agua.

Por otra parte, permiten la aplicación de las técnicas de fertirrigación de gran impacto en la producción. Por supuesto, hay zonas donde las represas tienen otros fines principales, pero en Córdoba contamos con varias de estas infraestructuras que fueron construidas específicamente para riego, sobre todo aquellas ubicadas en áreas o departamentos en los que antes de su construcción no se contaba con la posibilidad de reservorio de agua.

En esas zonas se han constituido grupos de regantes y sistemas específicos para la distribución de ese recurso. Córdoba es una provincia que si bien en épocas de regímenes pluviales abundantes tiene un ingreso de agua al suelo importante, durante las demás estaciones es una provincia seca, de manera que se debe trabajar para retener el líquido excedente. En ese sentido, desde la Dirección de Conservación de Suelos y Manejo de Agua, se proyecta no sólo para evitar la erosión, sino también para ordenar los escurrimientos y aprovechar lo que habitualmente se pierde por no poder dejarlo en el lugar.

En cuanto a la actividad ganadera, sabemos que la provisión de agua es fundamental. El sector ganadero utiliza estimativamente el 30 por ciento del agua que se destina para las actividades agropecuarias.

¿La pandemia afectó el trabajo agroganadero? ¿Hubo desempleo?

Los principales inconvenientes que se verifican como consecuencia de la pandemia son las limitaciones de circulación, principalmente las interprovinciales. En la actualidad estos inconvenientes prácticamente son de baja relevancia porque la producción fue considerada como actividad esencial desde el comienzo de las restricciones.

Siempre digo que esta pandemia va a dejar muchos motores averiados y que si hay un sector que va a tener que esforzarse por el resto, es el productivo. Por eso, desde el Gobierno de Córdoba bregamos para facilitarle las cosas y dejar que nuestros productores y trabajadores rurales hagan lo que saben hacer: producir.

Con la creación y gestión de las plataformas digitales, por ejemplo, desde la Provincia de Córdoba se llevan a cabo auditorías de manera virtual, la emisión del Documento Único de Tránsito (DUT) para el transporte de hacienda y también las habilitaciones de frigoríficos de chacinados, despostadores, elaboradores y transportes de productos cárnicos. Es por ello que la pandemia no ha tenido una gran repercusión en el sector debido al trabajo conjunto entre el lo privado y lo público, logrando un mutuo acompañamiento.

¿Cómo es la composición de la actividad ganadera en la provincia? ¿Qué porcentaje de la producción es para consumo interno y cuánto para exportación?

La ganadería de la provincia de Córdoba se compone principalmente de bovinos de carne y leche, porcinos, caprinos, ovinos y equinos.

Considerando que hasta el año pasado en la provincia de Córdoba sólo un frigorífico contaba con habilitación para exportar, la mayor cantidad de la producción se destina al consumo interno. En lo que va del año, se faenaron 366.532 toneladas de carne bovina y 452.889 toneladas de carne porcina.

Córdoba es un polo lácteo, ¿cómo es esta actividad?

Así es, tenemos el orgullo también de poder afirmar que Córdoba es la primera provincia a nivel nacional en producción láctea. Tiene polos de producción en sus tres principales cuencas: el departamento San Justo, la parte central de Villa María y parte del sur provincial. Con más de 11 mil millones de litros, ocupamos ese sitio de privilegio.

No es menos importante decir que la zona de San Justo, compartiendo con un área de la  provincia vecina de Santa Fe (que también es un centro importante en materia de lechería), forman la principal cuenca lechera de Sudamérica.

Fotos: Fabricio Esperanza - Jefe de Prensa del Ministerio de Agricultura y Ganadería de Córdoba.

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